En los últimos años, cada vez son más las voces que reclaman una reducción del uso de pesticidas. Estos llamamientos cuentan ahora también con el firme apoyo de la Comisión Europea: la estrategia “del campo a la mesa” y la estrategia de biodiversidad, recientemente publicadas, proponen un objetivo de reducción del riesgo y del uso de productos fitosanitarios para 2030. Lo que a veces se subestima es que los usuarios de pesticidas recurren al uso de esos productos por necesidad, para evitar las pérdidas de los cultivos a causa de los insectos, las enfermedades y las malas hierbas.
La posibilidad de reducir la necesidad de productos que tienen que comprar, combinada con una productividad de los cultivos estable o incluso mejorada, es sin duda algo que los agricultores encontrarían atractivo.
Una solución de compromiso que permite reducir el uso de pesticidas, en este caso herbicidas a base de glifosato, manteniendo al mismo tiempo la salud de los cultivos y un buen rendimiento, es el despliegue de técnicas agrícolas innovadoras y de precisión que hacen uso de las tecnologías digitales.
Existen nuevas tecnologías que captan datos sobre el estado del suelo a distancia, analizan las imágenes digitales que producen y utilizan esta información para identificar la necesidad de herbicidas o fertilizantes en puntos concretos del campo que están observando.
Lee más sobre tecnologías de aplicación precisasEn los últimos 30 años, el glifosato se ha convertido en el herbicida más importante del mundo de la agricultura.
Lee más sobre reducción de fitosanitariosEl despliegue de soluciones digitales para la agricultura de precisión tiene un doble impacto positivo.
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