Medioambiente y biodiversidad
El glifosato es una sustancia química contenida en numerosos herbicidas no selectivos desarrollados para eliminar plantas invasoras no deseadas (malas hierbas).
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Información útil
El glifosato es una sustancia química contenida en numerosos herbicidas no selectivos desarrollados para eliminar plantas invasoras no deseadas (malas hierbas). Los productos a base de glifosato están aprobados para su uso en la agricultura, la gestión de la vegetación, el césped y el jardín, las vías férreas, etc. En la actualidad, están registrados y se comercializan en más de 150 países.
Los herbicidas a base de glifosato, cuando se utilizan siguiendo las instrucciones de la etiqueta, son una herramienta segura y eficaz para controlar las malas hierbas que pondrían en peligro la producción agrícola, ya que, en concreto, supondrían una reducción de la productividad y la calidad de los cultivos, así como de las plantas, que perjudicarían la seguridad, la estabilidad y la usabilidad de las vías férreas, las carreteras, las presas, los pasos elevados, etc. Si las malas hierbas no se controlan de forma eficaz, puede generarse un incremento de los costes de producción o pérdidas de cosecha, lo que afecta negativamente a los ingresos del agricultor.
Los herbicidas a base de glifosato se empezaron a emplear en 1974 y se han utilizado de forma segura desde entonces. En la agricultura, se aplican en una amplia gama de cultivos y zonas de pastos.
El glifosato ha contribuido históricamente a la mejora del estado y la biodiversidad del suelo, lo que ha permitido suprimir o reducir en gran medida las prácticas agrícolas de laboreo. El uso de productos a base de glifosato también contribuye a prevenir la erosión del suelo, a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y a preservar más tierras para hábitats autóctonos.
Seguridad
El glifosato ha sido sometido a pruebas más exhaustivas que casi cualquier otra sustancia química activa utilizada en los fitosanitarios. Dichas pruebas han servido para llegar a la conclusión, sin duda alguna, de que el glifosato puede utilizarse de forma segura para sus aplicaciones previstas siempre y cuando se utilice siguiendo las instrucciones de la etiqueta.
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Usos
El glifosato se utiliza para controlar una serie de plantas invasoras no deseadas (malas hierbas), principalmente en la agricultura y la jardinería, pero también en praderas, zonas no cultivadas como vías férreas y arcenes, y en la silvicultura.
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